jueves, 14 de mayo de 2015

LOS NUEVE CAMINOS DE LA VIDA 1RA PARTE


Los nueve caminos de la vida- 1ra Parte-
En mis 30 años de ejercicio, como médico especialista en Medicina Alternativa, me han sorprendido siempre, las emociones que viven y sienten mis pacientes y que son motivo de consulta.
Dicha situación sale a la Luz de manera evidente, en el momento de elaborar la historia clínica y se manifiesta a través de las siguientes preguntas:

¿Doctor, cuál es la misión que yo tengo en esta vida?
¿Cuál cree usted que es el camino que debo tomar en este momento de confusión que me ha llevado a enfermar?
Para responder a estas inquietudes, nada simples, he querido compartir con todos ustedes, en qué consiste nuestro viaje por la vida, para así encontrar el significado en nuestras relaciones, laborales, profesionales, sociales, y con nosotros mismos y con nuestra parte espiritual.
Perder el camino o no sentirse a gusto con lo que hacemos en la vida, como función y además desconocer la misión de nuestra presencia en esta experiencia, es el resultado de una sociedad que cambia de manera veloz cada día, impidiéndonos así, adaptarnos de manera pronta, eficaz y exitosa a la demanda de una sociedad, que cifra sus valores en el éxito y la competencia por conseguir todo lo material y externo.

El resultado pues, no puede ser otro distinto que la frustración, la insatisfacción y el sentirse atrapado en un ejercicio o función que muestra una total ausencia de realización y justificación de la existencia.

La doctora Cassandra Lorius, Médica Alternativa y autora del libro: Medicina Para el Alma, nos hace saber a este respecto lo siguiente: “Todos nosotros poseemos un camino espiritual único para cada individuo, que es el modo en que nos comprometemos con la vida y aquello que otorga significado a nuestra existencia. Podemos saber si nos hayamos en el camino correcto, incluso aunque no sepamos decir exactamente de qué se trata: Cuando seguimos el camino correcto tenemos una sensación de congruencia en nuestras actividades y nos damos cuenta que pasamos más tiempo haciendo cosas que nos llenan de energía. Una prueba sencilla que indica si seguimos el camino adecuado consiste en preguntarnos cuánto tiempo dedicamos al día a realizar cosas que nos gustan o conmueven de verdad, y cuánto tiempo pasamos haciendo cosas que de algún modo nos despiertan sensaciones negativas.

Si hacemos precisamente lo que deseamos hacer, porque está de acuerdo con nuestro YO más profundo, no actuamos debido a la culpa, la obligación o la necesidad, sino porque no deja de ser la expresión natural de la esencia de nuestro SER. Es lo que proporciona a nuestra existencia un significado y, quizá, una misión.

El hecho de sentirnos seguros acerca de nuestra finalidad en la vida, afecta automáticamente a las personas que nos rodean: Todos nosotros conocemos a personas que consideramos sabias o de buen corazón, personas que escuchan a los demás, que siempre ayudan al prójimo y que no parece que tengan necesidad de hablar de ellas mismas y de lo que hacen. Están activamente comprometidas con la vida y contemplan las situaciones a las que se enfrentan con una perspectiva optimista. Parece que han encontrado y se guían por un mapa personal, y podemos percibir en ellas una conciencia inteligente de las cosas y un espíritu alegre, constituyendo un modelo para los demás. La energía fluye naturalmente a través de esas personas, lo cual les permite ofrecerselas a otros individuos, puesto que no necesitan retenerla ni reclamarla como si fuera exclusivamente de su propiedad.

Un modo de descubrir si nos encontramos en el camino que armoniza con los deseos del alma, es tratar de averiguar si tenemos algún bloqueo que obstruya el libre flujo de la energía. Los bloqueos por lo general son evidentes porque nos paralizan prácticamente cada minuto del día.

Todas estas informaciones obtenidas por dicha revisión son la herramienta sensorial que nos muestra la necesidad de investigar y hallar otros aspectos esenciales de la vida, que nos permitan superar la confusión y entrar plenamente en cualquiera de LOS NUEVE CAMINOS DE LA VIDA que en próximas entregas pondremos a disposición de cada uno de ustedes.

LOS NUEVE CAMINOS DE LA VIDA 2da PARTE


LOS NUEVE CAMINOS DE LA VIDA
EL CAMINO DE LA ACCIÓN (2DA PARTE)
Hola amigos, buen día para todos. Gracias por sus comentarios e interés en cómo encontrar el camino que le otorgue pasión a nuestra vida.

En esta entrega les hablare del primer camino EL CAMINO DE LA ACCIÓN

El objetivo primordial de las personas que se encuentran enmarcadas en este camino es manifestar siempre una respuesta demasiado intensa a los desafíos. Para ellos, es fundamental demostrar que poseen un conocimiento, lógico, consciente, estructurado y verificable acerca de cómo creamos, producimos y construimos cosas a través del ejercicio de la vida. Sientan que deben rendir al máximo, de sus posibilidades, trabajan duro y al principio tienden mucho bajo presión, pero al cabo de un tiempo, acaban estresados. Su respuesta a este desafío es volverse irritables, proclives a encolerizarse, viven con permanente tensión, saturados de adrenalina, cortisol y radicales libres, que terminan por impactar el hígado y el sistema nervioso central acusando permanentes periodos de insomnio, y una excesiva sensibilidad a los ruidos y estímulos externos.

Generalmente, despiertan entre 1:00 a.m. y 3:00 a.m. Hora de Hígado- según el reloj biológico orgánico del cuerpo-, acusando así una deficiencia energética de dicho órgano  y entonces se dedican a elaborar listados de las cosas que tienen que hacer, tan pronto amanezca el nuevo día.

Cabe destacar que las personas que militan este camino, en muchas ocasiones dejan de dormir las ocho horas, que requiere el organismo para recuperar el gasto energético de la jornada anterior, exponiéndose así a volverse adictos al trabajo, aislados de la parte social, no comparten con sus seres queridos o familiares, volviéndose críticos, sarcásticos, tiranos e incapaces de tener paciencia a la hora de interactuar con los demás.

Como todo no puede ser traumático, dentro de las cualidades positivas asociadas a las personas que siguen el camino de la acción se encuentran entre otras las siguientes:

-      Son personas proactivas y efectivas a la hora de concretar sus objetivos. Son intensas, dinámicas y vigorosas. Tienen influencia y liderazgo sobre los demás, suelen pertenecer a grupos de personas con capacidad decisoria, con sentido de iniciativa se acostumbran a ser prácticas y tienen éxito en lo que se proponen. Además son hábiles y laboriosas.
-      Igualmente, son de mente aguda, capaces de catalizar situaciones y hacer que estas sigan hacia adelante y con éxito. Son muy conscientes de los procesos y obstáculos de su ámbito profesional.
-      En el caso de los arquitectos, los que siguen el camino de la acción, utilizan principios armoniosos, tales como la geometría más pura, desarrollan una gran habilidad para observar y cualidades como la constancia en sus propósitos, impulso creativo, claridad en sus diseños, así como una concienzuda atención al detalle y sentido de organización a la hora de actuar.
-      Su poder reside en la capacidad creadora y no en la tendencia personal a desarrollar actitudes controladoras, propias del ego.

Finalmente, la enseñanza para el alma de las personas que militan el camino de la acción es entender y aceptar que disfrutar el viaje es más importante que llegar al destino, y que la vida es algo más que una serie de objetivos.

Nos volveremos a encontrar en quince días, nuevamente, cuando compartamos el segundo camino de la vida, el cual pondremos a su consideración para su estudio; hasta entonces.

ALFREDO SANCHEZ GOMEZ